El Palenque de la Feria del Caballo en Texcoco fue testigo de una noche de alta tensión tras el comunicadó Luis R. Conriquez, la furia de sus seguidores: su retiro de la interpretación de corridos, el género que lo lanzó al estrellato. La reacción del público fue inmediata y contundente, culminando en abucheos masivos y disturbios de consideración.
El caos desatado en su presentación del 11 de abril, el intérprete originario de Caborca, Sonora, emitió un comunicado buscando aclarar los motivos detrás de esta drástica elección artística. Con un tono de pesar, Conriquez expresó: “Lamento profundamente lo ocurrido en la presentación de anoche, 11 de abril, en el Palenque de la Feria de Texcoco”.
El cantante fue claro al desvincular su decisión de cualquier capricho personal, atribuyéndola directamente a las recientes directrices gubernamentales concernientes a la interpretación de corridos. En este sentido, enfatizó: “Para mí lo más importante como artista, me apego a las nuevas normas que el gobierno solicita respecto a la interpretación de corridos”.
La preocupación de Luis R. Conriquez trascendió la reacción del público a su anuncio, alcanzando los incidentes de violencia que se suscitaron durante el evento. Con evidente inquietud, manifestó: “Los lamentables hechos ocurridos anoche en el recinto, atentaron no solo contra la seguridad y por tanto la vida del público, así como también la integridad de mi equipo de trabajo y la mía”.
Consciente de la profunda conexión que sus seguidores tienen con los corridos, género que marcó el inicio y el ascenso de su carrera, el cantante solicitó comprensión ante esta nueva etapa. “Espero profundamente que esta situación pueda ser comprendida, pues yo seguiré trabajando en mi más grande pasión, la música”, declaró, buscando tender puentes con aquellos fans que expresaron su descontento de manera tan vehemente en Texcoco.
Lejos de significar un adiós a la música, esta decisión marca para Luis R. Conriquez el comienzo de un nuevo capítulo artístico. El cantante adelantó que ya se encuentra trabajando en ajustes significativos en su repertorio, comprometiéndose a implementar “cambios significativos en las letras que me hacen llegar y que yo interpreto para conectar con el público”. La noche turbulenta en Texcoco abre un debate sobre el futuro del corrido y la adaptación de sus exponentes a las nuevas regulaciones.
