Productores de pan artesanal, ante el cambio de semáforo epidemiológico color verde, prevén repunte de ventas y la apertura de establecimientos conforme vaya mejorando la economía.
El líder de los productores de pan artesanal, Jorge Hernández García expuso que en el primer año de pandemia, muchos establecimientos quebraron debido a la crisis, por lo que, el cambio de semáforo es un respiro para ellos.
Dijo que después de realizar un análisis, en el primer año de COVID-19, se observó que en años pasados el primer factor de riesgo para los comerciantes era la inseguridad, pero fue aún más la afectación generada por la pandemia.
“Algunos comercios cerraban por la inseguridad pero durante la pandemia se acrecentó el tema por la crisis económica”, expresó el líder del pan artesanal.
Mencionó que en años pasados por la inseguridad los establecimientos tenían que cerrar más temprano porque los clientes ya no salían de sus hogares para comprar y eso era una afectación para los productores.
“Con el semáforo verde, la gente se esa acostumbrando más y sale a comprar más tarde, eso nos permite vender un poco más”, expresó Hernández García.
Respecto al tema de la inseguridad, el líder productor de pan dijo que se ha visto mayor presencia de elementos en las colonias con mayor índice de inseguridad, como en el caso de la colonia Antonio Barona.
“Se ha ido mejorando el tema de la seguridad, vemos operativos conjuntos y eso permite que en este semáforo vayamos recuperando nuestros negocios”, agregó.
Señaló que a pesar del semáforo verde, los comerciantes de pan en Cuernavaca, siguen atendiendo las medidas sanitarias, tanto para proteger a sus trabajadores como a sus clientes que por muchos años han comprado sus productos con ellos.
