“Hemos fotografiado lo que nos distingue y lo que nos da dignidad”, mencionó Adalberto Ríos Szalay.
Él, junto a sus dos hijos, Ernesto y Adalberto Ríos Lanz, son los tres académicos y fotógrafos morelenses que han recopilado y creado el Sistema de Archivos Compartidos Tres Ríos, el cual ha sido incluido en el Registro Memoria del Mundo de la UNESCO y pronto estará disponible para todo el público.
Al momento de entrar a la casa de estos fotógrafos es muy notorio el trabajo histórico que tiene todo el ambiente, pues han convertido una parte de su casa en un enorme archivo fotográfico, almacenando más de 2 millones de imágenes digitales en cada rincón de este espacio.
Cuando se camina dentro de este lugar es inevitable que la mirada se pierda, ya que pareciera que una de las paredes ha sido remplazada por hileras de cajas, muy bien ordenadas y con los nombres de cada categoría de este acervo.
La recopilación del mencionado trabajo inició desde los años 70’s, con las aportaciones de Ríos Szalay en la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM).
Con el paso del tiempo se incorporaron, por decisión propia, Ernesto y Adalberto Ríos Lanz, continuando con esta labor de una manera ininterrumpida hasta la actualidad.
Cada uno de los ‘Ríos’ ha contribuido desde sus intereses y pasiones personales, para después desembocar en el mar fotográfico que han generado a lo largo de estos años, “cada uno con preparación distinta, con una formación propia.
“Hemos utilizado la fotografía como herramienta, en el caso de Adalberto, haciendo trabajos de investigación, muy serios, sobre la producción de alimentos, sobre la generación, hasta sobre el sazón de toda la República Mexicana y en muchas partes adicionales en el mundo; y Ernesto, en el aspecto de los bienes construidos, que son también parte importante de nuestra herencia y de nuestro patrimonio”, enfatizó Ríos Szalay.
Toda imagen de su archivo cuenta con una descripción informativa necesaria para su identificación. La incorporación de nuevos materiales es frecuente y la revisión y mejora de contenidos es tarea permanente, contando con la participación de especialistas de universidades hermanas, tales como investigadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (CONABIO), por ejemplo.
Sus imágenes reflejan rostros, manos, paisajes, arquitectura, biodiversidad y te trasladan a cada momento de la vida cotidiana de México o del mundo que han logrado captar a través de sus cámaras.