Los 36 municipios del estado de Morelos ya cuentan con una dirección de diversidad sexual, pese a la resistencia de algunas localidades que no querían incorporar estas direcciones en sus estructuras de gobierno, informó César Guerra García, director general de comunidades de atención prioritaria e inclusión de la Secretaría de Bienestar estatal.
De acuerdo con el funcionario, en algunos municipios estas direcciones también brindan atención a otras comunidades en situación de vulnerabilidad, ya que agrupan a distintos sectores dentro de oficinas de atención prioritaria. Además, señaló que desde la dirección que encabeza se ha impulsado la instalación de un mecanismo de coordinación municipal que permite articular esfuerzos, compartir experiencias y dar seguimiento a las políticas locales en materia de inclusión y derechos humanos.
Guerra García reconoció que al inicio del proceso hubo resistencia por parte de algunos ayuntamientos para instalar estas direcciones, especialmente en regiones donde las estructuras socioculturales conservadoras dificultaban el avance de políticas inclusivas. No obstante, enfatizó que se ha logrado establecer una coordinación efectiva con los 36 municipios del estado.
“Después de esa resistencia inicial, hemos podido trabajar de manera transversal con todas las direcciones municipales. Cada una, desde su contexto, ha comenzado a desarrollar acciones para visibilizar y atender las necesidades de las personas de la diversidad sexual”, afirmó.El director también destacó que la zona suroriente del estado presenta problemáticas particulares. “Estamos hablando de un problema sistémico. En esos municipios prevalece una estructura machista y patriarcal muy arraigada, donde muchas personas ni siquiera se atreven, como se dice popularmente, a salir del closet”, explicó.
En contraste, resaltó el avance logrado en municipios indígenas de reciente creación como Xoxocotla, Hueyapan y Coatetelco, donde, aseguró, no se han registrado resistencias significativas. En estos casos, las direcciones de diversidad sexual fueron instauradas sin mayores obstáculos, lo que ha permitido avanzar en la agenda de inclusión desde una perspectiva comunitaria.
Finalmente, César Guerra subrayó que el objetivo de estas acciones es generar entornos más seguros y respetuosos para todas las personas, sin importar su orientación sexual o identidad de género, y fomentar una cultura de reconocimiento, igualdad y no discriminación desde lo local.