El obispo de la Diócesis de Cuernavaca, Ramón Castro Castro, pidió a la feligresía ser humilde y sencilla para llegar más rápidamente a Dios.
En su mensaje dominical durante el vigésimo segundo domingo ordinario consideró que el verdadero cristiano tiene que ser humilde, es decir, debe conocer sus limitaciones y aceptar la verdad de lo que es, evitando la soberbia y el orgullo porque solo arraigan la maldad.
Aunque no es sencillo señaló que es necesario saber escuchar, ser observadores y prudentes, así como pedir a Dios sabiduría.
Monseñor Ramón Castro dijo: “hay que ser sencillos, el hombre y la mujer humildes no tienen complejos, no les importa quedar mal, no les importa que noten sus limitaciones humanas, por eso el ser humano humilde es realmente libre. La humildad tiene una fuerza de atracción que ni Dios se resiste a ella, Dios es atraído por el humilde”.
Además, señaló que, los humildes tienen la capacidad de recibir el mensaje de Jesús con mayor claridad, por ello, se refirió a los feligreses y señaló “no te vayas a poner en el lugar que no te corresponde. cuanto más grande es una persona en su interior, menos se hace valer y más sencilla es en el trato con los demás”.
Mientras que a las personas orgullosas no pueden ver ni vivir en Dios porque reina el orgullo, la vanidad y la autosuficiencia, las personas humildes están más cerca de Dios porque son gigantes por su humildad.
Finalmente informó que cinco sacerdotes viajarán a España y a Italia para continuar con su preparación sacerdotal, “ahora les pedimos sus oraciones para Dios los acompañe en este viaje que están por iniciar”.
Mensaje. El jefe católico dijo que las personas humildes son libres.
